La controversia sobre la participación de la boxeadora argelina Imane Khelif en los Juegos Olímpicos surgió después de que su primera oponente, la italiana Angela Carini, se retirara a los 46 segundos de la pelea. Aunque los altos niveles de testosterona de Khelif no fueron un impedimento para el Comité Olímpico Internacional (COI), generaron debate y llevaron a que Sergio "Maravilla" Martínez se sumara a la polémica.
El excampeón mundial de peso mediano y superwélter cometió un error al citar una publicación que afirmaba incorrectamente que Khelif era una boxeadora transexual, cuando en realidad es mujer de nacimiento. Martínez responsabilizó al COI por permitir que Khelif compitiera.
Maravilla Martínez expresó en su cuenta de X: "La estupidez e incompetencia humana carece de todo límite. Parece que millones de años de evolución de nada sirven si dudamos que debemos ir al ginecólogo o al andrólogo y nada+. Parece que tenemos que perder vidas de mujeres para reparar algo que ya no tiene arreglo. COI inútiles".
En respuestas a otros usuarios, Martínez reafirmó su posición, sugiriendo que la presencia de cromosomas XY en el ADN de Khelif, típicos del género masculino, debería ser suficiente para prohibirle competir en el boxeo femenino.